¿Qué es un cable resistente al calor?
Dicen que no hay mal clima, solo mala ropa, cuando alguien se queja de la lluvia y el frío. Si está lloviendo a cántaros, te pones una capa con una membrana plástica a prueba de agua, y contra el frío, hay chamarras con un cálido forro de felpa en el interior. También existen diferentes "prendas" para los cables: según su uso previsto, la cubierta exterior – la capa protectora externa de un cable – está compuesta por diferentes materiales. La combinación adecuada es clave, y se requiere un amplio conocimiento para lograrla. Aquí hay algunos ejemplos de cómo los científicos de materiales pueden diseñar las propiedades de los cables: El material preferido para la cubierta del cable es el PVC (cloruro de polivinilo). Es económico y puede marcarse fácilmente con un cuchillo, lo que facilita la eliminación de la cubierta exterior (desforre) para colocar la clavija. El PVC también resiste temperaturas superiores a 100 °C.
A temperaturas significativamente más altas, los cables de PVC ya no son adecuados, por lo que se requieren cables con otros materiales de cubierta. Dependiendo del rango de temperatura, se utilizan materiales como copolímero de poliolefina, propileno de fluoroetileno, politetrafluoroetileno y también silicón, que también se emplea en moldes para hornear o chupones para bebés. Con estos materiales se pueden alcanzar temperaturas de hasta 260 grados Celsius.
Si hace aún más calor, la estructura del cable debe cambiar radicalmente. Entonces, los hilos conductores, así como todo el cable, se envuelven con cinta de mica y trenzado de fibra de vidrio. Esto mejora las temperaturas permanentes hasta 650°C. Algunos cables pueden soportar incluso temperaturas superiores a 1500 °C durante un breve periodo de tiempo.
¿Dónde se utilizan los cables resistentes al calor?
Cuando las temperaturas son "normales", basta con utilizar cables normales. Los cables con cubierta exterior de PVC también pueden soportar el calor en un caluroso día de verano, por ejemplo en un sistema fotovoltaico. Allí se requieren otras propiedades, como la resistencia a los rayos UV. Los cables resistentes al calor se utilizan allí donde los equipos técnicos garantizan que las temperaturas se mantengan por encima de los 100 °C durante mucho tiempo. Este es el caso, por ejemplo, en el compartimiento del motor de los automóviles, cuando los cables para sensores se colocan cerca de partes calientes del motor.
En el hogar, las temperaturas son más altas en calentadores o estufas, en lámparas halógenas o en una sauna. En la industria, las temperaturas son muy diferentes, por ejemplo en los hornos de las grandes panaderías. A veces puede superar los 1000 °C en las centrales eléctricas de carbón o gas o en los altos hornos de producción de acero.
Por cierto: los cables especialmente resistentes al calor suelen tener un rango de temperatura ampliado incluso en el rango de temperatura más bajo. Por tanto, también son aptos para su uso en montaña o en el Ártico, y estos cables y conectores también se demandan para eventos deportivos de invierno. Estos componentes pueden soportar temperaturas gélidas de -40 °C o inferiores.
¿Qué tipo de cables resistentes al calor ofrece LAPP?
ÖLFLEX® HEAT 180 SiHF
ÖLFLEX® HEAT 650 SC
ÖLFLEX® HEAT 125 MC/C MC
No sólo en la cartera de cables de control industrial ÖLFLEX®, LAPP dispone de una amplia gama de cables especialmente resistentes al calor. Algunos incluso resisten el fuego, como el ETHERLINE® FIRE. Alcanza velocidades de transmisión de datos muy elevadas, de hasta 10 Gbit/s, con una alta calidad de señal hasta longitudes de cable de 100 metros. Un aislamiento de núcleo basado en poliolefina, así como un recubrimiento de los núcleos con una cinta especial ignífuga, bloquea las llamas durante al menos 120 minutos, tiempo suficiente para que el departamento de bomberos controle el incendio.
Además, LAPP ofrece una amplia gama de conectores y accesorios resistentes al calor, como los conectores EPIC® o los prensaestopas SKINTOP®.